Capacidades, rasgos, valores y actitudes, integradas no sólo por aquellas deseables, sino también por las que se van construyendo desde la práctica educativa cotidiana. Redactar el plan de experiencias a llevarse a cabo es responsabilidad del educador o la educadora, pero el proceso de planificación en sí debe evidenciar los aportes de todos los sujetos implicados en la experiencia educativa, donde, además, tenemos a miembros de la comunidad y a los niños y las niñas como centro de la propia experiencia.En el Nivel Inicial la educadora o el educador planifica de manera sistemática su trabajo, posibilitando que la intencionalidad pedagógica quede claramente expresada para dar seguimiento al proceso que vive cada niño o niña con lo que se evidencia la participación de los propios niños y niñas en esta función pedagógica.
Capacidades o características personales:
- Afectiva, alegre, cordial y cálida.
- Capacidad para enfrentar con calma y buen humor los acontecimientos diarios .
- Dominio de la voluntad.
- Conocimiento de sí misma y de los móviles que la puedan llevar a actuar de una u otra manera.
- Ética: cuidadosa de lo confidencial, de lo reservado.
- Capacidad creadora, innovadora, no atada a estereotipos.
- Capacidad de adaptación y disponibilidad al cambio.
- Capacidad para enfrentar situaciones y resolverlas criteriosamente.
- Comprometida con los alcances éticos y sociales de su profesión.
- Participativa, cooperativa y democrática.
- Tener equilibrio y coherencia en la utilización de los criterios para el desarrollo de la tarea.
- Capacidades profesionales:
- Con conocimientos didácticos, metodológicos, que le permitan guiar y acompañar los procesos de enseñanza, aprendizaje, planificación, orientación y evaluación, tanto individual como grupal de sus alumnos.
- Conocedora de los procesos de crecimiento, desarrollo y maduración de los niños y saber ubicarse en la perspectiva del niño.
- Que conozca, respete los valores y tradiciones de la cultura judía y nacional.
- Respetuosa del niño en particular y favorecedora de la interacción.
- Conocedora de las características socioculturales de la comunidad a la que presta servicios (atento a los cambios de actitudes de niños y familias).
- Con flexibilidad en función de una actitud de revisión permanente para innovar y anticipar informaciones.
- Con una actitud favorable para una tarea cooperativa, como integrante especifico de un grupo de trabajo.
- Reactualización psicológica/pedagógica permanente
- Reflexiva de su propio accionar.
- Capacidad de establecer relaciones entre teoría y práctica
- Sostenedora de los roles y funciones: ubicada en el ambiente de trabajo en relación a los demás.
- Estimuladora, creadora, aprovechadora de cada momento para propiciar nuevos aprendizajes.
- Armonizadora de los ritmos y funciones vitales de los niños
- Capacitada para conformar grupos de trabajo interdisciplinario.
- Conocedora de la importancia de la evaluación en proceso como herramienta para optimizar la práctica educativa.
- Claridad de criterios para plantear los reajustes convenientes.
En relación a las familias debe contemplarse:
- Discreción
- Contención
- Apertura al diálogo
- Calidez
- Comunicación sincera
- Serenidad
- Solidaridad
- Respeto
En relación con la institución se debe asumir actitudes de:
- Colaboración.
- Responsabilidad.
- Compromiso con la tarea.
- Compañerismo e integración en el equipo de trabajo.
- Coherencia con los objetivos.
- Apertura al diálogo y a la confrontación de ideas.
- Honestidad para asumir logros y dificultades.
- Respeto por las personas en sus diferentes roles (inspector, director, maestro de grupo, preceptor, docente con cambio de funciones, personal auxiliar, profesores especiales.